Clarisa Cassiau
Color tributo a Raúl Lozza
11 al 30 de Octubre de 2008 Si en el transcurso del Siglo XIX imperó –según Moholy Nagy- la idea de verdad, el Siglo XX se caracterizó por la pérdida del temor al espacio. Ambos factores, relacionados a nuestro conocimiento de la realidad, influyeron como progreso sobre la actividad creadora, y en especial sobre las artes visuales bidimensionales. Es en ellas donde los espacios imaginarios generan ese denominado “mundo aparte” de la obra de arte, en franca contradicción relacional con el entorno.Clarisa Cassiau es consciente de estos problemas y (…) es así que en esta exposición (…) comprobamos no sólo la reiteración de su intencionalidad constructiva y su capacidad creadora sino también el propósito tendiente a superar esas contradicciones inherentes a las artes de representación.
Cassiau sabe que lo ponderable y lo emotivo no provienen, como es natural, de una ecuación matemática. Pero también tiene conciencia del género artístico que practica, y comprende que el ojo palpa, envuelve, no solo un rasgo sobre la superficie -lo cual pone de manifiesto la dicotomía entre el espacio real y el espacio ilusorio- sino que eso ocurre también cuando esos rasgos en relieve actúan sobre el plano y arrastran consigo la misma problemática espacial.
La constante, entonces, en el arte de nuestra artista, es la conquista del espacio sensibilizado y no distorsionado.
Considerando esa propuesta concluiremos pensando que el paso de sus relieves para ser materializados en las tres dimensiones (…) revela el propósito hacia dicha meta. Es decir, sortear los espacios imaginarios y antagónicos sin descuidar la poética específica y emocional de su labor.
Raúl Lozza 1995